viernes, 25 de julio de 2008

Castells fue a la Rural.

"Yo sigo siendo clasista -declaró-. Y le digo que no a la discriminación. Hasta que el kilo picada no llegue a los 50 pesos, no paramos". Después de la visita y una buena sobada de lomo al toro Cleto, el lider de los desocupados se clavó un pancho con mayonesa de soja en la puerta del zoológico y atendió a la prensa de dorapa. "Es como en la guerra de Malvinas: primero fuimos a la Plaza de Mayo para derrotar a los ingleses y cuando terminó la guerra luchamos para tirarlo a Galtieri" afirmó, mostrando sus heridas de bala y las lesiones que le dejó en el cuero cabelludo la ingesta repetida de vino bonaerense. Como dato de color vale señalar que mientras el piequetero hablaba, un grupo de la sub especie monos careta cantaba colgado de las ramas de su hábitad artificial palermitano: "Si esto no es el pueblo, el pueblo dónde está". Al cierre de esta edición el lider piquetero señaló que le llamaba la atención el nivel de limpieza con que se tenía a los animales en la Rural. "Es extraño de ver. Nosotros nunca llegamos a tanto. Ni siquiera cuando parábamos en Puerto Madero".